
Quién es Candela González, la joven que brilla en
El director tenía claro que quería actores no profesionales para su primera película, un proyecto en el que se ha dejado la piel que protagoniza su hermano Óscar Casas.

Cuando Mario Casas por fin pudo ponerse manos a la obra con Mi soledad tiene alas, la película que comenzó a escribir en el confinamiento junto a Déborah François, tenía claro que la que sería su ópera prima como director estaría protagonizada por su hermano Óscar Casas, pero también que, para lo que tenía en su cabeza, quería rodearse de actores no profesionales. Y así, tras un extenso casting, el famoso intérprete que hasta ahora siempre habíamos disfrutado delante de las cámaras seleccionó a su protagonista femenina: Candela González, una joven malagueña de 25 años que no se dedicaba al mundo de la interpretación, pero que estaba muy vinculada al mundo del cine y de las artes desde otras de sus facetas profesionales.
«Al principio me hice bastante la difícil porque no me planteaba ser actriz», afirmaba González en su entrevista con SensaCine con motivo del estreno de la película el pasado 25 de agosto. Pero finalmente, animada por una de sus amigas, se decidió a presentarse al casting, y fue la elegida. Una decisión de la que no se arrepiente y que le hizo vivir una de las experiencias más interesantes de su carrera: «Me desahogué mucho y me removió». Por su parte, Mario Casas se muestra absolutamente orgulloso se su trabajo: «Es la definición clara de quién es ella: hace lo que le da la gana. Es una tía con un carácter y una personalidad arrolladora».
En Mi soledad tiene alas Candela interpreta a Vio, una de las jóvenes protagonistas de la historia junto al personaje principal, Dan, al que encarna Óscar Casas en un papel creado por su hermano para él, y Reno, al que encarna Farid Bechara. Ellos son tres chavales que viven en un barrio de Barcelona y que viven entre atracos, fiestas y peleas, pero, tras su apariencia, Dan esconde una sensibilidad artística especial que se percibe en su destreza con los graffittis. El regreso de su padre tras salir de la cárcel marcará un antes y un después cuando sentimientos bloqueados salgan a la luz y acabe huyendo, dejando a un lado su lado más ingenuo y poniendo a prueba la fidelidad de los suyos.
Durante el rodaje de Mi soledad tiene alas, Candela González y Óscar Casas experimentaron una fuerte conexión y su química es perfectamente notable en pantalla. De hecho, no es un secreto que la pareja de actores ha desarrollado una relación sentimental y es difícil no notar su gran sintonía en las alfombras rojas y eventos en los que se les ha visto juntos. Sin embargo, fuera del rodaje, Mario Casas prefirió que no tuvieran contacto: «A Candela no la podía ver fuera del set. Nos separaban en coches al terminar el rodaje. Ni en ensayos ni nada», contó en la premiere al reportero Edu Calle. «Yo solo la conocía en el rodaje y no me permitía verla nunca fuera del set. Viví solo durante tres meses en mi piso».
¿Que hacía Candela González antes de convertirse en la protagonista de la ópera prima de Mario Casas? La joven de 25 años comenzó estudiando en la facultad de Sociología y Ciencias Políticas, en el campus de Somosaguas de la Universidad Complutense de Madrid, aunque pronto dejó fluir su rama artística y no finalizó aquellos estudios. Así terminó en Comunicación Audiovisual y comenzó a interesarse por la dirección de fotografía y como ayudante de producción. Además, también probó suerte con el mundo de la música a través de la creación del colectivo Free Sis Mafia, como cantante de rap bajo el seudónimo Candelacuore. Puedes encontrar sus sencillos en Spotify,
Una vez seleccionada, González sintió vértigo, pero se lo pasó muy bien. «Im sooo nerviosa y contenta y asustada y orgullosa», escribía en Instagram antes de la premiere de Mi soledad tiene alas. Un trabajo que ojalá solo sea el primero de muchos.